La ciudad estaba tranquila, el lugar es pausado y ella también. Érika Villalobos es una artista que da cada paso sin buscar llamar la atención. Hoy está entregada a la obra de teatro ‘La Madre’ y ese es un buen pretexto para charlar sobre su presente, que no solo implica tener dos hijos, un novio y su trabajo, también de su manera de mirar la vida. Esa es la principal razón de esta conversación.
Érika, ¿Qué análisis se puede hacer de la frase: Primero soy madre y después mujer?
Creo que debe ser al revés.
Explícalo.
Es como los aviones, cuando te dicen que ante la pérdida de presión, caerán unas máscaras. Pues yo digo que primero hay que ponérselas para poder ayudar a los otros.
¿Entonces?
Por hacer bien a los demás, no puedes hacerte daño. Tienes que pensar en ti como número uno.
Ya veo a varias queriendo ‘lincharte mediáticamente’.
En mi lista, mis hijos están primero y yo también.
Coincido que uno debe quererse para poder querer a otros.
Uno antes de ser madre, nace mujer y eso siempre hay que tenerlo en cuenta.
¿Tus pequeños coinciden contigo?
Están totalmente de acuerdo.
¿Un ejemplo?
Mi hija me dice anda sal, yo voy a estar bien.
¿Ellos te impulsaron a tener una nueva historia de amor?
No. Eso lo decidí yo, pero fueron los primeros en saberlo.
¿Y cómo fue ese ‘primer round de estudio’ de los chicos con tu novio?
Fue como los defines, je, pero todo bien porque si ven a la mamá feliz, se sienten igual.
¿Y la relación de los chicos con él?
Se llevan bien.
‘TAMBIÉN ES CREMA’
Sé que en tu hogar todos son hinchas de la ‘U’, ¿tu pareja de qué equipo es?
También es crema, pero no vive acá años y se le ha ido bajando un poco el hinchaje.
Me comentabas que tu niña te pide que salgas.
Pero disfruto mi soledad. Me encanta.
¿Si te quedas sola en casa?
Celebro, ja, ja.
¿Puedes pasar todo el día encerrada?
Claro y me quedo en pijama y no me baño.
¿Y si tienes que comprar?
Por delivery.
¿Y qué haces?
Veo documentales, un poco de redes, o me meto a los videojuegos.
¿Si te invitan a una fiesta?
Pienso mucho, tiene que valer la pena.
¿Eso quiere decir?
Salgo hasta tarde y bailo.
¿Tienes ritmo?
En mi estilo bien.
¿Reguetón?
Todos suenan igual.
¿Ninguno se salva?
Una vez escuché una canción y era Daddy Yankee. Luego otro tema me sonó bien y era también de él. Entonces me di cuenta qué era alguien que me gustaba su música.
¿Alguien más?
No soporto a Bad Bunny y no entiendo por qué le agrada a la gente.
Érika Villalobos pensó en ser médico
¿Siempre quisiste ser actriz?
A los 30 años pensé ser médico.
¿Y ya no te animaste?
Ya tenía mi familia y como es una carrera tan larga, se me hizo imposible.
Debes compensarlo de alguna manera.
Seguro voy a llevar algún curso de primeros auxilios
Pero tu profesión también es maravillosa.
Soy una bendecida porque trabajo en lo que me gusta.
¿Hablas de todo con tus engreidos?
Sí y con ambos a la vez. Ya tocamos el tema del sexo, las drogas y todo lo demás.
¿Y cómo reaccionaron?
Muy bien y les aclare que si deseaban saber más y quizás se sienten cortos conmigo o falta de confianza, íbamos donde unos especialistas.
Fue un buen camino.
Les mencioné que no confíen en las redes o en un amigo, que pueden estar igual de confundidos.
Veo que tienes mucha comunicación.
Es que nunca los he puesto en una burbuja y cuando he tenido problemas han sido mi apoyo.
Ahora háblanos de ‘La Madre’.
Ana es mamá de dos hijos que se van de la casa y cree que el esposo también se va ir y se siente absolutamente sola y vacía y recurre a las pastillas y el alcohol para sentirse bien.
Entonces, ¿Super recomendada?
Es una comedia oscura que solo dura hora y cuarto. Lo interesante es que te tiene en la incertidumbre si lo que está pasando e verdad o solo está en la cabeza de la mujer.
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Estamos en el ‘Teatro de Lucía’ de jueves a lunes desde las 8 de la noche, menos los domingos que es a las 7 p.m. Las entradas la pueden comprar por la página de joinnus.com
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